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Full text of "Nuestra Raza n9 abr 1934"

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NUESTRA RAZA 


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Núm. 9 


Revista Mensual—Organo de la colectividad de color 


Ano I 


Redacción: Constitución 1760 
CUERPO DE REDACCION 

PILAR E. BARRIOS, CASIMIRO L. GUTIERREZ, ELEMO CABRAL, CEFERINO GUTIERREZ 
FELICIANO A. BARRIOS, E. BUSTAMANTE RIBEIRO, VENTURA BARRIOS, 

Carlos rodríguez pintos — Cronista Social: Srta. SELVA ESCALADA 


Toda correspondencia, giros, etc. debe ser dirigida a la Redacción. Toda colaboración aunque traiga seu 
dónimo debe venir firmada.- No se devuelven los originales sean o no publicados. Toda 
persona de color puede colaborar en esta revista. La dirección no se res¬ 
ponsabiliza de las ideas vertidas por los colaboradores 


NOTAS DE REDACCION 


PERSPECTIVAS PR0M1S0RAS 

Toma cuerpo, día a día, entre 
nuestra colectividad, la iniciativa 
lanzada desde estas columnas, so¬ 
bre creación de un centro cultural 

Al pronunciamiento espontaneo 
de algunos elementos, manifestan¬ 
do su optimismo al respecto, han 
surgido las opiniones francas, al¬ 
gunas concretadas en proyectos, 
que se nos han enviado, y los cua¬ 
les, en tanto que nos abocamos a 
su estudio, publicamos en es'e nú¬ 
mero poniéndolos a la considera¬ 
ción pública. 

En breves conversaciones sos¬ 
tenidas, hemos auscultado el am¬ 
biente, llegando a palpar una co¬ 
rriente favorable, que se insinúa 
en nuestra clase, deseosa al pare¬ 
cer de llegar a una finalidad prác¬ 
tica. 

Ante tan halagadoras perspecti¬ 
vas, renacen optimismos, y flore¬ 
cen esperanzas, que tienen su fun¬ 


damento en las manifestaciones de 
elementos sensatos, que en esta 
emergencia están dispuestos á 
contribuir con todos sus esfuerzos, 
para llevar a feliz término la ini¬ 
ciativa, saliendo de una vez del 
simple esbozo, en el cual tanto 
tiempo y tantas palabras se han 
malgastado hasta ahora. 

COMO AYER, EN LA BRECHA 

Pisamos con este número, el no¬ 
veno escalón en las tareas perio¬ 
dísticas, donde llegáramos un día, 
impulsados por el anhelo de con¬ 
tribuir en la medida que lo permi¬ 
tan nuestras fuerzas, al desarrollo 
social y cultural de nuestra raza. • 

No se nos escapa, que es pre¬ 
cisamente en estos momentos,— 
que en el medio social se plan¬ 
tean problemas Vitales de organi¬ 
zación—, que la obra requiere to¬ 
da nuestra mayor atención, para 
que de ella se obtengan los frutos 
esperados. 







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NUESTRA RAZA 


“CASA DE LA RAZA” 

Publicamos a continuación, conjuntamente con su ex¬ 
posición de motivos, las bases del proyecto sobre crea¬ 
ción de la CASA DE LA RAZA, que ha enviado a nues¬ 
tra agrupación, para su estudio, -el señor Marcelino H. 
Botaro: 


Montevideo, Marzo 23 de 1934. 

—Señores miembros de la Agru¬ 
pación NUESTRA RAZA. — 
Estimados señores: 

No se me escapa, a pesar, de 
la ingenuidad que me caracteri¬ 
za, la invasión de fueros que co¬ 
meto, al enviar al seno de vues¬ 
tra agrupación, para su conside¬ 
ración, las adjuntas Bases, res¬ 
pecto a la posible organización 
de la CASA DE LA RAZA. 

La finalidad que impulsa esta 
actitud es: la de un sano com¬ 
pañerismo de tareas periodísti¬ 
cas; que se dimaniza, por una 
justa inquietud de transcenden- 


Hasta ahora, podemos decirlo, 
hemos contado con. el apoyo deci¬ 
dido de un núcleo, que por lo que 
representa en el seno de la colec¬ 
tividad, nos da la pauta de que es¬ 
ta nueva tentativa, si bien puede 
adolecer de defectos, como toda 
obra humana, lleva como bandera 
el alto propósito de bregar por la 
armonía y el progreso moral y 
material de la clase social que re¬ 
presentamos en la prensa. 

Por ello nos encontráis, como 
decimos, hoy como ayer, siempre 
en la brega. 


tales realizaciones que no repa¬ 
ran en esas “cuitadas” barreras, 
que el consabido Laisser faire 
(dejar hacer), retrae hasta lo in¬ 
finito lo que hace ya tiempo, que 
nuestra raza debió hacer y estar 
hoy sólidamente cimentado co¬ 
mo una gran finalidad cultural 
de nuestro medio ambiente. 

Tengo la muy fundada presun- 
sión, que, quizás en las carpetas 
de esa Agrupación, se encuentra 
alguna obra más práctica y tras- 
cendetal que la que expongo; 
pero, ello no me arredra ya que 
no obstante, no pretendo que mi 
idea triunfe sino lo que más de¬ 
seo es: acelerar, las ajenas in¬ 
quietudes de mejoramiento cul¬ 
tural, con las escasas luces que 
poseo. 

En mis bases, que no preten¬ 
do, que sean absolutas ni menos, 
les reconozco otro mérito, que 
las de poder ser ampliadas con 
más ilustres mejoras; creo con¬ 
templar un principio de organi¬ 
zación de fácil realización, siem¬ 
pre que las acompañe una sana 
voluntad, vehemente entusiasmo 
en todos los que se comprome¬ 
tan a cooperar, en su realiza¬ 
ción. 

Esto es, todo lo que puedo de¬ 
cir, sin necesidad de rectifica- 



NUESTRA RAZA 


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ciories, sobre mi actitud y pro¬ 
pósitos, cuando me animaron a 
la estructuración de las bases. 
Dejo lo personal, por no coinci¬ 
dir con mi modalidad, y escue¬ 
tamente expongo las razones, 
del articulado de las Bases. 

La necesidad de la organiza¬ 
ción de un foco cultural en nues¬ 
tro medio, es inmanente. Reedi¬ 
tar las múltiples consideracio¬ 
nes que desde las columnas de 
la Revista NUESTRA RAZA, se 
han hecho, es fatigosa redun¬ 
dancia. El artículo l.o determi¬ 
na con meridiana luz, la finali¬ 
dad y aclara quienes “Deben y 
pueden ser sus mantenedores”. 

El artículo 2.o fija en forma 
previa, la diversidad de asocia¬ 
dos que pueden determinar su 
desarrollo, sin exclusiones, ya 
que no determina, ni sexos ni 
razas, sobre sus componentes. 
Al fijarse el número de miem¬ 
bros al Consejo y su calidad de 
asociado que requieren su terce¬ 
ra parte, no me he ajustado, na¬ 
da más, que a lo que aconseja 
la práctica más elemental, en 
ese orden. 

Por el artículo 3.o doy a mi 
juicio la más justa contempla¬ 
ción económica, al elemento de 
nuestra raza, así como también, 
establezco, con toda regularidad, 
la opción que pueda caber a ca¬ 
da uno de nuestros elementos. 

Los que sincera y realmente 
anhelan, nuestra elevación cul¬ 
tural, pueden optar sobre cual¬ 
quier categoría; y sin especifi¬ 
caciones raciales, se entreabren 


las puertas de la acción de don¬ 
de se quiere hacer uso en forma 
amplia aunque su categoría, sea 
de modesto asociado, ya que op¬ 
tando, por la de socio coopera¬ 
dor, cuyo aporte mínimo es in¬ 
significante, puede hacerlo mᬠ
xime suscribiendo una cuota vo¬ 
luntaria, del valor que desee. 

El artículo 4.o, es de un orden 
tan usual, que ociosas resultan 
todas las consideraciones, en su 
orden general; pero en lo par¬ 
ticular, sobre DONACIONES, LE- 
GADOS O SUBVENCIONES; 
creo, que si no cabén reparos en 
su establecimiento, los hay, en 
su cortapisa, que dice: NO SE 
CUMPLIRAN, EL OBJETO DE 
LAS DONACIONES, LEGADOS 
O SUBVENCIONES”, cuando 
ellas contraríen las finalidades 
propuestas por la “CASA DE LA 
RAZA”. 

La razón en que la apoyo es 
la siguiente: La política de in¬ 
filtración que está en boga, to¬ 
ma a cualquier organismo de un 
fin específico, y, bajo subvencio¬ 
nes, legados o donaciones, hace 
ejecutar, parte de su programa 
proselitista. A nuestra organiza¬ 
ción, puede caerle en suerte, una 
de esas lastimosas cooperacio¬ 
nes, que, a través de su magna- 
midad, contraría sus fines; y yo 
creo que es más preferible con 
tiempo, PREVEER, que luego, 
tardíamente, LAMENTARSE. 

Con el artículo 5.o, se define 
nítidamente todo el programa a 
desarrollarse, con las tres pro¬ 
posiciones que lo estructuran, 


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NUESTRA RAZA 


son la acción inmediata, dando 
médula y nervio a todo su plan 
de desarrollo, que dentro de lo 
mínimo es multiforme y necesi¬ 
ta de un gran caudal de energías 
y recursos económicos abundan¬ 
tes. 

La cláusula A) es imprescin¬ 
dible para el reordinamiento y 
ejecución de planes; como así 
mismo para la más estrecha vin¬ 
culación de todos sus elemen- 
tos. 

-La cláusula B) es más que un 
simple deseo, es firme, clara e 
imprescindible, la necesidad de 
organizar una biblioteca, que 
eclética o tendenciosa es absolu¬ 
tamente necesaria. 

La cláusula C) es culmina¬ 
ción, desarrollo y abierto paso a 
la realización de difusión cultu¬ 
ral, donde se han de contemplar, 
valorizándose, nuestros elemen¬ 
tos raciales y los ajenos, dentro 
todas las finalidades de la cul¬ 
tura, siempre que a ellos no se 
opongan, ataques a credos filo¬ 
sóficos, tendencias políticas o 
discuéiones escolásticas de dog¬ 
mas religiosos. 

En las cláusulas A), B) y C) 
qu# son el principió del abece¬ 
dario de la grandeza de nues- 
ti'a acción, o el epílogo de nues¬ 
tra decadencia, descansa la or¬ 
ganización de la CASA DE LA 
RAZA. 

Los artículos 6 . 0 , 7.o, 8.0 y 
9.0 son de elemental práctica cu¬ 
ya exposición de móviles, los 
creo innecesarios; por lo cual 
dejo así expuesto ante vosotros, 


mi entrometido proyecto. 

Quedando a vuestras órdenes, 
para toda aclaración que se juz¬ 
gase necesaria solicitarse me sus¬ 
cribo atentamente. 

Marcelino H. Bottaro. 


CASA DE LA RAZA 

Bases para su organización 

Artículo l.o Con el loable pro¬ 
pósito que una mayor profusión 
cultural, beneficie al elemento 
de la raza negra, fúndase en 
Montevideo, la “CA?A DE LA 
RAZA”, que se constituirá con 
sus propios elementos y simpa¬ 
tizantes, que en sus diversas ca¬ 
tegorías de asociados, propen¬ 
dan a su desarrollo y manteni¬ 
miento. / 

Art. 2.0 Esta Institución que¬ 
dará organizada con las siguien¬ 
tes clases de asociados: Activos, 
Suscriptores y Cooperadores, de¬ 
biendo regirse, por un Consejo 
Directivo compuesto de 9 miem¬ 
bros, cuya tercera parte, serán 
socios activos. 

Art. 3.0 Fíjase como cuotas de 
asociados, de carácter mensual 
y anual, de acuerdo con el art. 
2 . 0 , la siguiente escala: 

Socios Activos, abonarán pe¬ 
sos 1.00 mensual. 

Socios Suscriptores, abonarán 
$ 0.50 mensual. 

Socios Cooperadores, cuota 
voluntaria, cuyo mínimo queda 
establecido en un peso ($ 1 . 00 ) 
anual, pago por adelantado. 

Art. 4.o Los fondos de esta 
Institución serán constituidos, 


NUESTRA RAZA 


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por: las recaudaciones que se 
perciban como cuotas de asocia¬ 
dos, donaciones, legados o sub¬ 
venciones. que instituciones pú¬ 
blicas o privadas le acordasen, 
debiendo ser estrictamente apli¬ 
cados esos fondos, a los enun¬ 
ciados de estas Bases, salvo los 
casos, que los donantes, legata¬ 
rios o el determinado objeto de 
la subvención no lo determina¬ 
ran de antemano, otro objeto; el 
cual se cumplirá siempre que su 
finalidad se encuadre dentro de 
los propósitos de la “CASA DE 
RAZA”. 

Art. o.o El Consejo Directivo, 
las comisiones o subcomisiones 
que se designen a sus efectos, 
determinarán en la forma que 
lo considei’en más viable, pre¬ 
vio detenido estudio y regular 
aprobación, las siguientes pro¬ 
porciones. 

a) Arrendamiento de un lo¬ 
cal para sede, con su res¬ 
pectivo mobfliario. 

b) Organización y funciona¬ 
miento de una Biblioteca 
Popular, cuyo material bi¬ 
bliográfico, se obtendrá, 

; por donaciones y adquisi¬ 

ciones que se realizarán, 
en la medida que los re¬ 
cursos recaudados, lo per¬ 
mitan. 

c) Organización de Ciclos 
Culturales, de orden: 

■ Científico, Artísticos, Li¬ 
terarios y Audiciones Mu¬ 
sicales con el elemento de 
la raza u ajenos a ella, 
debiéndose observar, que 


en el desempeño de esas 
misiones, no se ataquen 
principios de fondo: filosóficos, 
políticos o religiosos. 

Art. (}.o Es facultativo del C. 
D. el iniciar en forma privada u 
oficial, toda gestión de orden ad¬ 
ministrativo o particular, conse¬ 
cución de las finalidades enun¬ 
ciadas en estas Bases, debiendo 
las Comisiones que se designen, 
solicitar el visto bueno del Con¬ 
sejo, en todo obrado a que tuvie¬ 
ran que recurrir, para el mejor 
cumplimiento de sus funciones. 

Art. 7.o Mientras la Institu¬ 
ción que surja del conglomera¬ 
do de buenas voluntades, que ini¬ 
cia la organización de “LA CA¬ 
SA DE LA RAZA” no se dea su 
estatuto; este organismo se re¬ 
girá en la analogía de los casos, 
por las normas que regulan a 
las demás instituciones de des¬ 
arrollo cultural, que existen en 
el país, en todo lo que sea, per¬ 
tinente, a su más amplio des¬ 
arrollo. 

Art. 8.0 En la elección del pri¬ 
mer Consejo Directivo se pro¬ 
cederá a su votación, en simple 
carácter de miembros, debiéndo¬ 
se, entre ellos, en sesión espe¬ 
cial, procederse, a la distribu¬ 
ción de cargos. 

Art. 9.0 Queda fijado el man¬ 
dato del Consejo, por el término 
de un año, ajustándose sus fun¬ 
ciones y deberes, a lo que acuer¬ 
dan las leyes y reglamentos, a las 
instituciones, de personería re¬ 
conocidas. 


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NUESTRA RA Z A 


NOTAS DE ARTE 

Julián García Rodeau, virtuoso de la guitarra 


Nos lo habían dicho en distintas 
oportunidades: «Cuando ^deseen oir a 
un verdadero artista de la guitarra, va¬ 
yan a escuchar a Julián García Ron¬ 
deau». Y fué así, que nos largamos una 
tarde hasta su domicilio de la calle 
Francisco Bauzá N.° 3528, ávidos de 
captar las infinitas sensaciones, que de 
antemano preveíamos nos haría gustar 
el joven concertista de nuestra raza, al 
pulsar su instrumento, con la maestría 
que él sabe hacetlo. 

Y no nos habían engañado; porque 
Julián García Rondeau, es un artista, 
— ya lo dijo un crítico autorizado, — 
« dotado de exquisita sensibilidad y 
« poseedor de una técnica perfecta, pu- 
« diendo decirse que el difícil arte de 
€ la guitarra, no tiene secretos para él». 

Debemos confesarlo, que la misma 
impresión de sorpresa que produjera 
en otros, la presencia del guitarrista, la 
sentimos nosotros. Creíamos encontrar¬ 
nos ante una persona a quien los es¬ 
tudios y los años, hubieran encorvado 
un tanto las espaldas y marcado en su 
rostro, esas huellas inevitables, que el 
tiempo deja implacablemente esterioti- 
padas, sobre estos predestinados de la 
gloria, que consagran su vida al arte. 
Pero nada de eso: Julián García Ron¬ 
deau, es un joven de 2\ años!, mejor 
dicho, un muchacho grande, con un al¬ 
ma más grande aun, que se abre toda 
interpretando la «Serenata» de Schu- 
bert, que gime contrita, en «Una Lᬠ
grima» de Sagreda, o vibra intensa¬ 
mente, ante los cantos rodados» que 
evoca la «Vidalita , de Sinópolis. 


Ante las preguntas que le hiciéramos» 
García Rondeau nos respondió: 

—Mi vocación por la música se ma¬ 
nifestó cuando aún tenía muy corta 
edad, pero empecé a estudiar solfeo a 


los 14 años, con el eminente profesor 
don Hermógenes Urquizu, padre; me 
gustaba el canto, y bajo la dirección 
del mismo tomé parte en los coros en 
diversas fiestas religiosas, en las igle¬ 
sias de los Capuchinos, del Cordón, etc. 



Me hubiera gustado continuar, pero 
a consecuencia de una operación que 
debí sufrir en la nariz perdí la voz y 
pensé entonces dedicarme a algún ins¬ 
trumento; mis padres eligieron el vio¬ 
lín, pero a pesar de que. adelantaba só¬ 
lo alcancé a estudiar durante seis me¬ 
ses, pues mi gran afición era la gui¬ 
tarra. 

-¿...? 

—Mi padre tocaba bastante bien este 
instrumento, pero por cifras, y él fué 





NUESTRA RAZA 


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quien me enseñó las primeras posicio¬ 
nes, hasta que tuve la suerte de en¬ 
contrar al gran profesor y compositor 
uruguayo don Gregorio Rodríguez, del 
«Instituto Verdi», con el cual, guiado 
por sus buenas orientaciones y unido a 
mi enorme entusiasmo, hemos llegado, 
sino a la cumbre (porque en la gui¬ 
tarra nunca se puede decir haber lle¬ 
gado) a una posición que me llena de 
íntima satisfacción, esperando poder 
superarme cada vez más. 

—Me he presentado a varias salas 
de Montevideo, ;habiendo efectuado al¬ 
gunas giras a los departamentos del 
interior. 

_ ¿ mm ? 

—Mis autores preferidos son: Agua¬ 
do, Sors y Tárrega de los antiguos, y 
de los contemporáneos, Rodríguez, Ba¬ 
rrios y Sinópolis. 

—Una de las cosas que más cuido al 
ejecutar, y es mi constante anhelo, es 
el poder trasmitir a mis oyentes la 
misma sensación que yo siento y mis 
propias emociones; para eso, evoco re¬ 
cuerdos que eleven mi espíritu, tales 
como el de mi finada madre, suponien¬ 
do que ella me escucha, lo cual hoy 
sería para mí el placer más infinito.... 

Para delectación nuestra, ejecutó a 
continuación «Canción de Cuna», de 
Rodríguez; < Página Infantil», de Sirera; 
«Capricho Arabe» 3 ' «Recuerdo del Al- 
hambra, del inmortal Tárrega; el Mi¬ 
nué en la menor», de Sors; «Asturias», 
Albéniz, culminando con las célebies 
«Variaciones sobre un tema», de Mo- 
zart (adaptación de Sors, y r que es con¬ 
siderada en el ambiente musical, como 
una de las composiciones de más difí¬ 
cil interpretación. 

El señor García Rondeau, ejecuta au¬ 
diciones periódicas, los martes y jue 
ves en la Radio Carve. Además da 
lecciones de guitarra a una docena de 
discípulos, entre ellos los conrazaneos 
Sr. Severino §*erreira y la Srta. María 
Elena González. 


¡“Todo por mi hijo”! 

Ayer he presenciado un hecho dolo¬ 
roso, que ha dejado mi corazón lleno de 
pena. En una puerta, una mujer, joven 
aún, con un niño en los brazos, tendía 
sus manos a toda persona que pasaba 
a su lado, en demanda del miserable cen- 
tésimo para alimentar a su niño. 

¡Pobres seres! Más que mujeres pare¬ 
cen una maldición del destino... 

Pasa un joven, un hombre sin corazón, 
un guarango—no sé como llamarlo. La 
pobre mujer le extiende la mano, implo¬ 
rando una limosna, para su nene, y el 
mal hombre, por toda repuesta, se quita 
de la boca el cigarrillo que lleva encen¬ 
dido y con toda tranquilidad, lo deja 
caer en la mano de la infeliz mujer. Ella 
con esa humildad qne caracteriza a los 
mendigos* le dice: «Que Dios se lo pa¬ 
gue, joven»! 

La pobre mujer no ha pronunciado 
ninguna otra frase; el jovenzuelo, sonríe 
de su acción y hasta se siente satisfe¬ 
cho de «sip caridad»; pero no ha camina¬ 
do muchos pasos, cuando un señor que 
ha presenciado la escena en silencio, se 
acerca y le dice con acritud: «Que Dios 
se lo pague, malcriado», dándole al pro¬ 
pio tiempo, un recio golpe que lo tumba 
en el suelo. 

La joven mendiga, sigue inmutable la 
escena, mientras dos gruesas lágrimas 
corren por sus mejillas. Luego, cuando 
todo ha pasado, se acerca al señor y le 
dice dolorida: «No le hubiera hecho na¬ 
da señor; estoy tan acostumbrada a esos 
desprecios que ya ni sé si eso es tam¬ 
bién una caridad... Hay personas que no 
ven en mí nada más que una pordiosera 
y sin embargo, soy una madre- En el 
escenario de la vida, Dios reservóme 
este papel para que lo desempeñara y 
tengo que arrastrarme, por este hijito, 
que es la única fuerza que me alienta 
para seguir viviendo esta vida de mise¬ 
rias*... 

Carlos Rodrigues Pintos 

Abril I 934 . 


V. Barrios 



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nuestra raza 


POETICAS 

-- 


i SOLO HASTA MI! 

Otoño nos visita como siempre, 
romántico y gentil; 

Vestido con su traje primoroso, 

de perfume y encanto juvenil. 

Todo ríe a su paso y está lleno 
de una risa sin fin; 
solamente mi espíritu rebosa, 
de tristeza y esplín! 

Otoño nos visita como siempre, 
locuaz $ retozón, 

reponiendo en los pechos y en las almas 
una nueva ilusión. 

Sólo hasta mí no llega la alegría 
y aunque el labio modula tina canción, 
son las quejas nostálgicas que vierte 
un ser que lleva enfermo el corazón! 


H - Lt @» 

Iba vestida con leves tules, 

Como el plumaje del colibrí, 

Cuando una tarde la vi pasar 
Por vez primera por junto a mí. 

Tenía su cuerpo, bello, elegante, 

La gallardía de la palmera 
Y eran sus labios como las rosas, 
Rojas y hermosas de primavera. 


ANHELO 

Bajo el sol tropical de tu mirada 
libando el néctar de tu boca rosa, 
sintiera la más grande y más hermosa 
dicha por nadie todavía alcanzada. 

Mi alma entonces, de júbilo embriagada 
por tu influencia super misteriosa, 
mi lira llenaría de prodigiosa 
inspiración, jamás nunca soñada. 

Si las cosas del mundo un Dios rigiera, 
yo a ese Dios de rodillas le pidiera, 
llegar me deje a ese sublime instante; 

de contemplar de cerca tus sonrojos, 
bajo la luz de tus divinos ojos 
y el fuego de tu boca calcinante!.. 

Pilar E, Barrios 

Abril 1934. 


ASAR 

Eran sus ojos, dulces, serenos, 
Como la brisa de un día estival 
Y en su semblante se reflejaba 
Todo un poema sentimental. 

Todo reía, todo cantaba, 

Bajo el influjo de su mirar; 

Cuando aquel día que nunca olvido 
Por vez primera la vi pasar. — F. A. B. 


A la gran poetisa Victoria Nuñez 

No sé como explicarme claramente lo 
que sentí—cuando leí una carta dulcísi¬ 
ma tuya— Entonces soñé y en mis bra¬ 
zas te vi; cerca de que eras mía y con 
locura contra mi te estreché. 

Pero a un leve susurro ¡desperté y al 
despertar por mis ojos — el alma se me 
escapó; trémulo de emoción tomé tus 
cartas que en lejanos días en tono de 


profunda pasión me hablabas con ardor 
y con vehementes frases pasionales—in¬ 
flamabas mis sentidos con tu candente 
amor! 

¡En ellas me contabas tus constantes 
anhelos de poder disfrutar el placer; me 
hablabas de inquietantes desvelos y de 
estremecimientos que no llegué a saber; 
en una me decías que eras feliz por ha¬ 
ber visto en mis ojos la pasión y en otras 
que sentías en tu pecho el dardo de los 
celos punzante el corazón... 

A qué tus temores de perderme, si tu 
delirante solías ofrecerme mil dichas 



NUESTRA RAZA 


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Contribución de la mujer a nuestra obra 



Impregnada de una grata emoción, que conmueve todo mi ser, ai 
saber que han desaparecido todas las hostilidades que existían de 
tiempos remotos en nuestra raza, gracias al bregar constante de un 

núcleo de personas, dignas de to¬ 
do elogio, pues han sabido de¬ 
mostrar a nuestros hermanos ra¬ 
ciales que con buenos procederes 
y con un poco de perseverancia, 
se llega a conquistar el aprecio y 
la unión de nuestros corazones. 


No creo bajo ningún principio, 
que haya una sola persona que 
permanezca indiferente ante tan 
grandiosa como meritoria obra, 
porque es a nosotras, a quienes incumbe mantener en un plano su¬ 
perior a nuestra raza.— Y siendo dignos de nosotros mismos, lle¬ 
garemos a la cumbre. 


Ahora son nuestras mujeres» 
quienes tienen el deber moral dé 
acercarse hacia nosotras, contri¬ 
buyendo con escritos o con libros, 
pues tengo entendido que esta 
pléyade de hijos sanos y nobles, 
tiene la magnífica idea de bregar 
por la creación de una institución 
cultural, que será — si es que ca¬ 
be esta frase — nuestra definitiva 
rehabilitación. 


Abril 3 934. 


Maruja," Perryra 


que el destino no nos dejó gozar* 

Y hoy al leer lo tuyo he roto tus 
cartas, donde en lejanos días me habla- 
blas de amor. 

Mario Batallan 
Febrero 10 de 1934. 


can !*€CU£R!M> 

Recuerdo obsesionante; — Torturas y 
alegrías de todos mis instantes!—Dos ma¬ 
nos poderosas parece que han calcado— 
Tu imágen en mi ser y estoy por tí im¬ 
pregnado.— Divino encantamiento!— Si 








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NUESTRA RAZA 


Necesidad de la fundación de un Club 


Señores: Como les he prome¬ 
tido, en esta segunda diserta¬ 
ción, voy ha exponerles algu¬ 
nas ideas respecto a la forma en 
que se deberá proceder, para la 
fundación de este Club, y algu¬ 
nos cometidos del mismo. 

Bien; se debe: 

l.o Realizar una asamblea de 
carácter general. 

2.o Una vez en ella, los orga¬ 
nizadores, después de poner en 
conocimiento el motivo de la 
misma, citarán los nombres de 
las personas, que a juicio de 
ellos sean más aptos, para inte¬ 
grar la primer COMISION DI¬ 
RECTIVA, citando, (por ejem¬ 
plo) para Presidente a A o B, 
para Vice Presidente, a C o D, 
y así hasta su total integración 
siempre que los nombrados me¬ 
rezcan la aprobación de los pre¬ 
sentes. 


hasta asoma a mis ojos la luz de tu mi¬ 
rada,—Y tu risa en mi boca la veo apa¬ 
recer! - Tu recuerdo, al dormirme, me 
da las «Buenas noches» — El primer 
«Buenos días» lo recibo de tí; —Y hasta 
un credo he aprendido—Tan extraño! tan 
mío! —Oración milagrosa que desgranan 
mis labios—Muy quedo para tí!— Yo no 
sé si es placer, yo no sé si es martirio 
—El tenerte engarzada tan hondamente 
en mí,—Lo que sé es que arrancarte de 
mi ser no podría.—Así es que diariamen¬ 
te y a cada paso digo:— «Benditas sean 
mil Veces las penas y alegrías— Si te 
tengo en mi vida! ¡Bendito sea el vivir >! 

Manuei, Romero Santos 


(Conclusión) 

3.o Esta Comisión será inte¬ 
grada por nueve miembros dis¬ 
puestos en la siguiente forma: 
un Presidente, un Vice Presi¬ 
dente, un Secretario, un Pro Se¬ 
cretario, un Tesorero, un Pro 
Tesorero, y tres Vocales. 

4.o Una vez formada esta 
Comisión se procederá a labrar 
un acta, en la que se dejará cons¬ 
tancia de lo resuelto por la 
asamblea. Acto seguido, se abri¬ 
rá un registro de socios. Si el nú¬ 
mero de los inscriptos en prime¬ 
ra instancia alcanzara a seten¬ 
ta, la Comisión Directiva, nom¬ 
brará entre éstos, tres comisio¬ 
nes más, compuestas de cinco 
miembros, a saber: una ARTIS¬ 
TICA, una de FIESTAS, v una 
de PROPAGANDA. 

La Comisión ARTISTICA será 
formada así: un Director, un Co- 
Director, tres Ayudantes. 

La de FIESTAS, en esta for¬ 
ma: un Presidente, un Secreta¬ 
rio, tres Comisarios. 

La de PROPAGANDA de este 
modo: un Director, un Co-Direc- 
tor, tres Ayudantes. 

5.0 La Comisión Directiva, 
nombrará, también una Comi¬ 
sión Honoraria. 

6.0 La Directiva, creará, en¬ 
tre estas cuatro Comisiones, una 
Sub-Comisión, para estudio y 
formación de los estatutos o re¬ 
glamento interno, al que deberán 
ajustarse todos. 



NUESTRA RAZA 


11 


7.o Esta Sub Comisión, una 
vez aceptado el estatuto ya no 
tendrá objeto alguno, pasando 
por lo tanto, sus integrantes, a 
desempeñar los cargos que se 
les asignara anteriormente. 

8.0 Las Comisiones: ARTIS¬ 
TICA, de FIESTAS, y de PRO¬ 
PAGANDA, estarán subordina¬ 
das de una: la DIRECTIVA. 

9.o Todas estas Comisiones 
desempeñarán sus cargos, inspi¬ 
rados sobre estas bases o nor¬ 
mas: ALTRUISMO, ABNEGA¬ 
CION, CULTURA y DESINTE¬ 
RES. 

10.o Una vez fundado este 
Club, sus dirigentes, tratarán de 
fomentar en alto grado la unión 
social, elevar el nivel cultural e 
intelectual, realizando un inter¬ 
cambio literario-periodístico, con 
los conrazáneos, naturales de 
otros países. 

ll.o Se'deberá realizar toda 
clase de actos públicos y cultu¬ 
rales. 

12.o Se realizarán tertulias, 
entre los socios y familias de es¬ 
tos. 

13.o Estas tertulias serán bi¬ 
mestrales, trimestrales o semes¬ 
trales según se crea más conve¬ 
niente. 

14.o Se alquilará para ello, 
una casa (esto es, cuando las 
circunstancias lo permitan) pa¬ 
ra sede social, en la que se ins¬ 
talará, (aparte de la Secreta¬ 
ría) una Biblioteca social (ya 
por donación o adquisición pro¬ 
pia), una sala de lectura, un sa¬ 
lón - bar, con toda clase de jue¬ 


gos, que sirvan para solaz y en¬ 
tretenimiento de sus asociados. 
15.o La Comisión Directiva es¬ 
tipulará la cuota del socio en la 
cantidad que crea conveniente no 
excediendo de un peso ($ 1 . 00 ). 
16.0 La Comisión encargada de 
la formación de los estatutos, 
pondrá en ellos, a los que tienen 
derecho, con tal cuota. 

17.o Al año de fundado este 
Ck|b, dará en sus salones, cla¬ 
ses de instrucción primaria y se¬ 
cundaria gratuitamente a todos 
los corazáneos que la soliciten. 

18.o Nombrará también, pa¬ 
ra esa fecha, una comisión es¬ 
pecial que tendrá por cometido 
el dar cuenta de la cantidad de 
analfabetos que existan, tratan¬ 
do de contemplar a todos, crean¬ 
do para ello diferentes horarios 
y días, para que éstos puedan 
concurrir a clase. Y para los que 
vivan retirados de la sede so¬ 
cial, se tratará en la medida de 
lo posible, de proveerlos de me¬ 
dios, para que puedan concurrir 
a las escuelas públicas, más pró¬ 
ximas a sus respectivos hogares. 

19.o La Directiva editará una 
hoja o revista, mensual, bimes¬ 
tral o trimestral en la que se 
dará cuenta a los socios de la 
inversión del dinero recibido ’ y 
de la labor desarrollada en esos 
últimos períodos. 

20.o La Comisión Directiva, 
sesionará dos veces por semana 
en sus comienzos y una cada 
quince días después. v 


Y ahora que ya les lie dado a 



NUESTRA RAZA 


1 2 


conocer, mis ideas respecto a es¬ 
te Club, les diré que estoy dis¬ 
puesto a ampliarlas o rectificar¬ 
las, siempre que alguien que 
simpatice con ellas, me lo solici¬ 
tara, diré más aún: yo estoy dis¬ 
puesto a colaborar con todos 
aquellos que quieran llevar a ca¬ 
bo la realización de esta insti¬ 
tución, que será una obra para 
beneficio de toda nuestra raza. 

Y ahora, yo, por mi parte ha¬ 
go una exhortación a todos mis 
conrazáne,os sin distinción #e 
sexos, para que aporten su apo¬ 
yo, para llegar a la cristaliza¬ 
ción de lo que dejo expuesto, por 
que si llegáramos a lograrla, es¬ 
ta institución, habremos dado un 
gran paso hacia la perfección 
moral, social y cultural de nues¬ 
tra colectividad, porque no de¬ 
bemos olvidar que somos una 
fuerza activa dentro del orden 
social que rige el mundo. 

Alberto Noé Méndez. 


PARA. LAS CALENDAS GRIEGAS 


Con motivo de los festejos dfe 
conmemoración del Centenario de 
Jura de la primera constitución 
del país, surgieron en nuestro me¬ 
dio, un par de núcleos más o me¬ 
nos bien organizados y subvencio¬ 
nados por la Comisión N. del 
Centenario. Uno de ellos, se de¬ 
nominó «Centro de la Juventud*, 
bajo cuyos auspicios se realizó un 
vasto, original y atrayente progra¬ 
ma, a cargo de jóvenes conocidos, 


í 

* 

sindicados con algunos méritos t| 
artísticos, musicales y literarios de? 
nuestro ambiente, quienes con ver-| 
dadero entusiasmo y honoraria-? 
mente, cumplieron a satisfacción jí 
del numeroso auditorio que se i; 
congregó en aquellas memorables jj 
noches de julio, en el salón de ac-p 
tos públicos del altruista «Centro If 
Protección Chaffeurs». ‘ 

Como punto final y conexo alj- 
programa, se llamó al elemento es-i) 
tudioso o aficionado a un concur-t' 
so literario. Sin hipérbole, baseslí 
modestas que garantizaban corree - 1 
ción y en grado superlativo im-i¡ 
parcialidad y seriedad; el juradoil 
compuesto con personas de noto-;i 
rias condiciones' de sinceridad. 

De los premios estipulados al 
concurso de marras, había una her¬ 
mosa copa» donada al efecto, y que ; 
podemos dar fe existió, porque la 
vimos en exhibición dentro de una!; 
elegante vitrina, durante el desarro¬ 
llo de la «Semana Social», conjun¬ 
tamente con un buen número de 
medallas al parecer de oro. 

Se realizó el programa dentro;] 
de un marco de cordialidad y en] 
medio del ferviente júbilo de la di-¡¡ 
rectiva y sus adherentes. El con-ij 
curso literario aún permanece eni! 
el silencio, a pesar del largo tiem-jj 
po transcurrido, ¡próximo a cumplir}! 
los cuatro años! 

¿Negligencia, o qué? ! 

Si el jurado no se entendió oj 
terminó por consunción de volun-j: 
tades, debió de haberse nombradoíj 
otro en su lugar, nunca dejar o; 
pretender que la inercia concluya;! 



NUESTRA RAZA 


15 


con la esperanza de los incautos 
concursantes. 

Si hubieron, en dicho Jurado, 
•miembros que no le dieron impor¬ 
tancia al certámen, era de orden 
nombrarle reemplazante. 

Si en su oportunidad leyeron los 
trabajos y no presentaron el dic¬ 
tamen, se Ie^ hubiera pedido el 
juicio personal, por escrito, hacer 
el cómputo y fallar de acuerdo con 
su resultado. 

Si los trabajos presentados no 
se ajustaban a las bases, por tales 
o cuales circunstancias, debió de 
declararse desierto y asunto con¬ 
cluido. 

Y así indefinidamente a cada situa¬ 
ción se le hubiera encontrado una 
solución, si la buena voluntad hu¬ 
biera inspirado a los miembros de 
la C. Directiva organizadora y úni¬ 
ca responsable. 

Es evidente que este injustifica¬ 
ble proceder es una anomalía que 
merece ¡os más severos reproches 
de las personas conscientes, que 
han sabido aquilatar el esfuerzo 
hecho por los concursantes, que 
no debieron jamás, bajo ningún con 
cepto, ser así burlados. 

Quiere decir, pues, en buen ro¬ 
mance que para quienes trabajaron 
con la cabeza, en las inolvidables 
jornadas del año treinta, nones. 
Para los que trabajaron con las ex¬ 
tremidades inferiores, medallas, ob¬ 
jetos, pergaminos y etc. _ 

Creemos que hemos puntualiza¬ 
do errores que demuestran, cuan¬ 
do no incorrección en los proce- 


Reflexiones del momento 


Pienso que los hombres de 
nuestra raza deben representarnos 
en todos los actos de la vida. 

De la mujer pienso lo mismo, 
pues aunque en el ambiente inte¬ 
lectual no se distingue en la mis¬ 
ma proporción que el hombre, re¬ 
vela día a día ponderables aptitu¬ 
des. 

Hay tres o cuatro maestras cu¬ 
ya personalidad en el magisterio 
nacional es muy bien conceptuada 
por su inteligencia e ilustración. 

Sería hermoso poder implantar 
en el espíritu de las masas la cer¬ 
tidumbre de que en la escuela, en 
el liceo, en la universidad, en fin, 
en el deporte mismo, nuestra pre¬ 
sencia debe ser el centinela culto 
de nuestra intervención en el mo¬ 
vimiento político, social e intelec¬ 
tual, vida y nervio del progreso 
del país. 

Hablamos constantemente de 
nuestras sentidas aspiraciones de 
reivindicación social, pero hay que 
hacer algo para llegar a esa her¬ 
mosa realidad, porque bien sabe¬ 
mos que no interpretamos la ne¬ 
cesidad del momento; es un an¬ 
helo que nuestros hombres del 
pasado procuraron convertir en 
realidad a fin de que en los días 


dimientos, una mala fé de cuya 
existencia dudamos. 


NAGEL 


Del Dr. ILDEFONSO PEREDA VALDES 


SCOTTSBO R O 

“A NUESTRA RAZA” 

El día lluvioso sobre las cárdenas tierras me lleva a Scottsboro. 

Ellos están muy lejos, los nueve amigos, más allá de los mares, 

En pequeña ciudad y en cárcel lóbrega y pequeña. i 

No ven la luz alegre los que jamás pierden la alegría, 

La luz opulenta que amasa el pan de la vida. 

La penumbra apenas se filtra entre las rejas y la cal de las paredes. 

■ Solo los excarcelados sabemos del pedazo de cielo lejano ! 

Allá en la plácida Georgia las tierras son rojas, 

Los árboles tienen el color de las cenizas, 

Y las casas, blancas como palomas en la sombra. 

-Entre aquella luz y la tan plácida alegría. 

La tragedia de los campos de algodón como copos de nieve. 

Las cabezas de astracán de los negros plantadores 
Son como girasoles entre flores de espuma. 

En los campamentos de los chain gan, allá en las plantaciones 
Sudan los negros desde la mañana hasta que la tarde cae, 

Y el sol se hunde en el abismo da sombras marcando un nuevo día. 

Algunos se tumban al suelo para no levantarse jamás. 

¡La burguesía refinada no por eso detiene sus fiestas, 

Aunque el látigo estalle furioso o el cepo lento caiga. 

La rebelión se castiga con un lynchamiento legal ! 

El juez I-Iawkins firmó la sentencia de muerte 
De Hawood, Paterson. De tarde conversó con sus hifos. 

Porque el juez Hawkins tiene hijos, 

Esposa, madre y hermanos 

Pero dejó olvidado su corazón entre el legajo del proceso. 

Doscientos mil obieros de Alemania,, 

Cien mil obreros en Estados Unidos. 

Diez mil trabjaadores de Checoeslovaquia, 

Cien mil negros que marchan sobre Washington, 

A la calle salieron para oir la voz de Ada Wrigt, 
a la calle marcharon para protestar por Scottsboro. 

Scottsboro es D palabra mágica que despierta al trabajador, 

Scottsboro es la lucha por el blanco y el negro ! 

que vivirnos, verdadera era de pro- mente de las masas la certidumbre 
greso, estuviéramos perfectamente de que sí orientan su capacidad de 
organizados en el orden social, acuerdo con las necesidades apre- 
Costará sin duda hermanar ese miantes del momento, no tropeza- 
ideal con nuestras aspiraciones; rán con tantas dificultades para 
por múltiples circunstancias núes- actuar en todos los ambientes. Creo 
iro avance es detenido; pero si que si aún existe ese odioso pre¬ 
ponemos en acción todas núes- juicio de raza, de nosotros mis- 
tras aptitudes haciendo llegar a la mos depende desterrarlo de núes- 



NUESTRA RAZA 


15 


tro medio. De la inteligencia y del 
sentimiento humano de hombres 
superiores dependió también la li¬ 
beración de nuestra raza de la es¬ 
clavitud. Menos incertidumbre y 
más solidaridad debemos demos¬ 
trar en nuestros actos. Soy un con¬ 
vencido de que allí donde se es 
tudie o donde se realice un acto 
de verdadera trascendencia, es ne¬ 
cesario que uno de los nuestros 
nos represente. A la juventud le 
diré que si estudia y se ilustra de¬ 
bidamente, su figuración entre sus 
compatriotas jamás importará un 


peregrinaje doloroso. Tal el caso 
del doctor Rondeau. Se impone 
que seamos los verdaderos defen¬ 
sores de nuestros intereses colec¬ 
tivos. Mis reflexiones del momento 
nada concretan, ciertamente, pero 
el orden de mis ideas está en todo 
de acuerdo con las que exponen 
diariamente, todos los que colabo¬ 
ran en esta revista. 

Siempre solidaridad, debe ser el 
lema que nos hará alcanzar el so¬ 
ñado ideal. 

Aguedo Suaves Peña 

Abril 1 9 34. 



Por SELVA 


CUMPLEAÑOS 


La familia Valín de Escalada, recibi¬ 
rá a sus amistades el día 12 de Mayo, 
con motivo áeV cumpleaños de la señora 
Juana. 

El 8 del presente cumplió años la ni- 
ñita Olguita Bayac. Con tal motivo se 
vió muy visitada por sus muchas amigui- 
tas dando margen tal contecimientoj a 
una alegre reunión infantil. 

ENLACES 

El 24 del pasado Marzo, realizóse en 
la residencia de los estimados esposos 
Rodríguez-Pintos, el enlace de la’seño¬ 
rita Aída Pintos con el joven Octavio 
Acosta. Apadrinaron la ceremonia reli¬ 
giosa el señor Alejo Abalos y la señora 
Elena F. de Abalos: Dicho aconteci¬ 
miento dió lugar a una brillante reunión 
social. 

—Como anunciáramos en nuestro nú¬ 
mero anterior, el 4 del que luce con¬ 
trajeron enlace la señorita Esmeralda 
Olivera con el señor Pedro Peña. Los 
novios fueron muy homenajeados por sus 


AMANDA GARCIA 


numerosas relacones, organizándose aí 
final una animada fiesta que alcanzó 
proyecciones magníficas. 



Flor delica¬ 
da, prematu¬ 
ramente a- 
rrancada pos 
el Destino, 
del seno de 
los suyos. En 
el primer a - 
niversario de 
su deceso (8 
de Abril) de¬ 
dicamos esta 
nota recorda¬ 
toria, a la niña que en vida fuera todo 
bondad y don de gentes. 





16 


NUESTRA RAZA 


CAMBIO DE RESIDENCIA 

Los estimados esposos Cancela-Díaz, 
notifican a sus amistades que han trasla¬ 
dado su domicilio a la calle Uruguay 2127 

VIAJEROS 

Visitó la ciudad de San Carlos en la 
Semana de Turismo el señor Alejandro 
Rodríguez. 

—Nos visitó, nuestro activo Agente en 
Maldonado, Sr. Eugenio A. Rccha. 

—Estuvo en Minas nuestra amiguita 
señorita Delia Olivera. 

— Regresó de Colonia Suiza el señor 
Angel Ramos. 

ENFERMOS ' * 

Continúa mejorando en su estado de 
salud, la señora Matilde R. de Barrios. 

—Ha experimentado alguna mejoría 
dentro de su gravedad, la señora Do¬ 
minga Gutiérrez. 

NECROLOGICAS 

El 22 del pasado mes dejó de existir 
en esta la Srta. Socorro Otuño, perso¬ 
na muy vinculada a la sociedad maragata 
Paz en su tumba. 

—El S del corriente a la avanzada 
edad de 84 años, falleció en esta capital, 
tras las alternativas de una rápida dolen¬ 
cia, donde fueron inútiles los recursos 
de la ciencia, la señora Juana García, 
vastamente vinculada, en nuestro medio 
social. Su deceso enluta a las familias. 
Liñán, Bueno, Ferreira y Süva, a las 
que enviamos nuestros pésames. 

—A la avanzada edad de 77 años falle¬ 
ció el 12 de este mes, la señora Car¬ 
men Pintos de Castellanos. 

Haya paz en su tumba y resignación 
para sus deudos* 

- 3 = = , - = 

Desde Maldonado 

VIAJEROS 

Regresó de la capital, donde pa¬ 
sara varios días la señorita María 
Vicenta Rodríguez. 

—Del mismo punto llegó a esta 
a pasar unos días entre los suyos 


S. COLLADO AGUIRRE 

OFRECE SU TALLER DE PLANCHADO 
Calle Arecuá N.° 6 Montevideo 


la Sra. Dominga A. de Rocha. 

—Para la ciudad de San Carlos 
donde se ha radicado definitiva¬ 
mente el Sr. Leoncio Zalayeta y flia 

— Procedente de San Carlos es¬ 
tuvo en esta la Srta. D. M. Pereira. 

ENFERMOS.—Muy mejorada en¬ 
cuéntrase la Sra. Ines A. de Nú* 
ñez quien se vió obligada a guar¬ 
dar cama varios días. 

— Desde hace varios días en¬ 
cuéntrase bastante delicado de sa¬ 
lud el niño de los esposos Cabral 
Acosta, de nombre Julio. Hacemos 
votos por su mejoría. 

Corresponsal 
Maldonado Abril de I934. 

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